
Programas pilotos en Atacama, O’Higgins y Aysén crearán los nuevos planes de desarrollo regional rural
El Presidente de la República, Sebastián Piñera, encabezó esta mañana la primera sesión del Consejo Nacional Asesor de Desarrollo Rural (CNDR), en una ceremonia realizada en el Palacio de La Moneda. El Consejo apoyará la implementación de la Política Nacional de Desarrollo Rural (PNDR) firmada por el Mandatario en 2020 y se espera que pueda ser replicado en regiones para que posteriormente se creen políticas y planes de desarrollo regionales rurales.
Con ese fin, y en el marco de la primera sesión, la subsecretaria de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere), María Paz Troncoso, junto a la ministra de Agricultura María Emilia Undurraga y a los intendentes de Atacama, Patricio Urquieta; de O’Higgins, Ricardo Guzmán y de Aysén, Margarita Ossa; firmaron un convenio para implementar un proyecto denominado “Modelos de Intervención para Zonas Rurales”, cuyo objetivo será elaborar planes regionales de desarrollo rural que sirvan de insumos para las políticas de planificación de los gobiernos regionales, todo esto en miras del actual proceso de fortalecimiento a la regionalización que experimenta el país.
También se contempla que se constituyan mesas regionales de desarrollo rural, similares al CNDR, con actores públicos, privados y de la sociedad civil. La ejecución de los pilotos está prevista entre agosto de 2021 y enero de 2022.
“Los procesos de descentralización están en el corazón del trabajo que desarrollamos como Subdere. Y, por cierto, el mundo rural es uno de los espacios que nos interesa a impulsar, llevando oportunidades de desarrollo y fortaleciendo capacidades que permitan este desarrollo integral, con sentido de integración, donde todos y cada uno somos parte de un futuro mejor”, dijo la subsecretaria Troncoso.
Sesionó por primera vez el Consejo Nacional Asesor de Desarrollo Rural
El CNDR está conformado 30 miembros que representan al mundo público, privado y a distintos gremios y asociaciones y nació para apoyar la implementación de la Política Nacional de Desarrollo Rural (PNDR). Se trata de una instancia de carácter consultivo y propositivo, cuya misión es colaborar con el diseño de un Plan Nacional de Desarrollo Rural con miras al 2050, visibilizar las necesidades y desafíos de los territorios rurales, y proponer mecanismos para mejorar la calidad de vida y oportunidades de sus habitantes.
“Quiero agradecer a los miembros del consejo por ser parte de esta política pública que queremos que se proyecte en el tiempo, por muchas razones, todos sabemos que existe una brecha muy grande entre el mundo rural y el mundo urbano, se ve en los niveles de pobreza, en el acceso a la salud, la calidad de vida, la educación y otros indicadores y vemos que hay brechas que no tienen justificación. Lo que queremos es igualdad de oportunidades y por tanto quisiéramos que esta política conduzca a que la calidad de vida en el mundo rural y urbano se igualen”, fueron parte de las palabras que el Presidente de la República, Sebastián Piñera durante el encuentro.
En la instancia, también participaron de manera presencial los ministros de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt, de Obras Públicas, Alfredo Moreno y la presidenta del CNDR y Premio Nacional de Geografía, Pilar Cereceda.
“Se trata de una gran noticia para Chile, para las regiones y para las 263 comunas rurales, que representan el 83% del territorio nacional. Se trata de un gran hito que no solo permite visibilizar el mundo rural y su importancia para el país, sino que se traduce en un paso en la descentralización, en la integración y, especialmente, en la valoración de los territorios”, agregó la ministra Undurraga.
En ese sentido, la presidenta del consejo, Pilar Cereceda agradeció el compromiso del Gobierno y destacó que “tenemos todas las herramientas para ejercer nuestra función, contamos con el apoyo de ODEPA y los distintos ministerios que conforman el Consejo. Nos hemos constituido como un órgano permanente, que trasciende a este Gobierno, con periodos de renovación de 4 años, tiempo necesario para modernizar un espacio rural inclusivo. La meta es la sustentabilidad social, ambiental, cultural y económica. No repetiremos estudios ni diagnósticos conocidos, se nos pide aportar con ideas para soluciones y acciones concretas que impulsen la Política Nacional de Desarrollo Rural”.